RESISTE KIEV
“Desde Kiev
Aquí, como en toda Ucrania, la situación es terrible. No hay palabras para describir este crimen.
¡Crimen contra la humanidad! Se bombardean hospitales, hogares de niños huérfanos, casas habitadas por civiles, ambulancias que se desplazan a velocidad transportando heridos. Las bombas caen como lluvia sobre nuestras casas. ¿Cuántas vícitmas? ¿Cuántos niños muertos? No hay respuesta, porque no hay un motivo para esta guerra. Todas las ciudades son asediadas continuamente, bombardeadas por tanques rusos, pero nuestras tropas, nuestros muchachos, se mantienen fuertes porque saben que estamos unidos a ellos moralmente y materialmente colaborando con ellos proveyéndoles información sobre el avance de las tropas rusas, y nos damos coraje mutuamente.
Ucrania es un país de paz que ahora al precio de sangre inocente debe defenderse del agresor ruso, Putin, que solo quiere el territorio y no le importa ni el pueblo ucraniano ni el pueblo ruso.
Otra cosa terrible es que los soldados rusos toman a mujeres con niños (diciendoles que los van a evacuar) y los usan como escudos humanos para entrar en las ciudades sabiendo que así no serán atacados.
Hay que rezar mucho para que esta guerra absurda termine pronto”.
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